Esta cifra tan espectacular, 400 millones, es el número de chinos que no han nacido. ¿Usted es de los que piensan que hay muchísimos chinos en China y en el mundo entero y que fluyen los negocios de chinos por doquier?... Bueno, pues le asiste la razón, pero sepa que podrían ser un mogollón más, ¡un mogollón de 400 millones!
¿Dónde están los 400 millones de chinos que no han nacido?... ¡Coño, en ningún lado porque no han nacido!... ¿Y por qué no han nacido?... Bien, hay una explicación lógica. No han nacido desde que en 1.979 la ley china limitó el número de hijos por matrimonio. Y los chinos son muy serios, cumplen las leyes a rajatabla. Al que desobecede a la Autoridad se le condena a tormentos chinos o lo ejecutan directamente. De ahí que se hayan quedado sin nacer 400 millones de chinos, ni más ni menos, por lo que les pudiese pasar a sus padres.
En China no se andan con escrúpulos, que si el preservativo es pecado, que si los hijos que Dios nos mande... ¡Ja!, no hay cojones para ponerse a tener hijos en plan Urdangarín. Las leyes están para cumplirlas impepinablemente, que los chinos no son como Francisco Camps o los taurinos.
